miércoles, 2 de enero de 2019

Historias cortas para recordar


  Hola mi muy apreciados lectores, Tome la iniciativa de escribir sobre la calma que reinaba a los venezolanos en épocas pasadas, en el que todo parecía medio tranquilo, en cuanto a lo que te dedicabas en el hacer de alguna actividad lucrativa te alcanzaba para satisfacer tus necesidades básicas, claro si te esforzaba un poco mas y al tener una profesión trabajar en esta ni se diga, te podías dar algún lujo de viajar a alguna ciudad de nuestro país oh fuera de esta y comer algunos días en un restaurante de tu ciudad de origen.
 Ahora estas cosas ya en esta Venezuela esta difícil, luego de algún tiempo se comenzaba a transformar una nueva realidad, a la cual no pensamos que sucedería, veíamos las noticias de otras partes del mundo, donde la gente pasa hambre por alguna guerra, oh por algún desastre natural, pero en nuestro país de que pasara no lo imaginamos, llego el punto de que poco a poco vimos el deterioro de nuestra sociedad, día a día el llegar a un punto de que tenias que levantarte temprano para poder agarrar un buen punto en alguna cola de algún supermercado, abasto o bodega para poder comprar algún producto y comer ese día, si no llegabas a tiempo era la decepción, o sentirte mal por no poder comprar y llevar algo a tu casa, esto se ve a diario en todos los locales de venta de comidas en toda Venezuela, pero el llegar a tiempo a un buen puesto de una cola es lidiar primero con la inseguridad que invade tu zona, y tener el suficiente dinero para la compra de ese día, y sobre todo algo muy fundamental enfrentarte con algún bachaquero que en palabras criollas originada por la escasez, es aquella persona que se coloca en los mejores puestos para que el producto se le venda de primero y ese lo comercializa a un precio mucho mas alto de lo adquirido originariamente, es todo una odisea el producto y esto ocurre con todos los artículos de primera necesidad, esta es la vivencia y cuentos entre todos los que hacemos cola en este país a diario, no se duerme tranquilamente porque estas pensando que vas a comprar al día siguiente, ya que el producto no te dura una semana, en algunos locales te venden de un producto oh máximo 3, eso no alcanza para muchos en una familia de 4 o más integrantes, esto vino a generar un desasosiego entre muchos de los que no podemos adquirir más productos de los que antes conseguíamos en cualquier bodega oh abasto de nuestra comunidad, esto te genera sin que te des cuenta lentamente estrés, depresión, inquietud, impaciencia, disgustos entre otros. y esto esta llevándonos a un punto de visitas a psicólogos, médicos, e inclusive a quitarse la vida..,   Estas lineas que les escribo no es más para que se pongan tristes o demos lastima es solo que cosas como estas no se pueden olvidar, ya que nuestra sociedad olvida muy rápido o algunos no le toman importancia y esto se tiene que  tratar de manera rápida y analizar a profundidad por las generaciones que vienen, para que  no caigan en lo mismo nuevamente. 

Próximamente estaré publicando otros pequeños artículos muy a la realidad del acontecer diario que se vive en nuestra sociedad, 

                                                Atentamente  Cecilia 

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